Luna

La noche oscura es retada cada anochecer por la luna que con su luz pretende iluminar el cielo, mostrando así su rostro más bello, es entonces cuando, nubes negras se interponen y cubren la luna con una capa espesa de algodón oscuro, tornando su luz  en un tenue, delicado y frágil destello. Empieza a llover y las gotas caen con fuerza contra mi ventana, el viento que se intensifica con el paso de los segundos, la fascinación que tenia al cuando miraba aquella enorme luna ha desaparecido, y el ruido del viento abaneando las persianas  intensifica mi tensión, convierte la atracción en miedo, y una sensación entraña me recorre el cuerpo en forma de escalofrío, el cielo enfurecido suelta un destello de luz, que atraviesa las rendijas de mi persiana llenando mi habitación de luz por solo unos segundos, a la intensa luz le sigue un sonido atronador, fuerte e intenso que hace que se me rice la piel, al poco rato la lluvia cesa, y no se manifiestan mas truenos, las nubes ahora insignificantes se abren, y dejan paso a la luna, y ella en todo su esplendor, nos regala todo lo que recibe y refleja su luz sobre los intensos bosques, que llegada la primavera brotarán de nuevo más fuertes y sanos, los caudalosos ríos, que nos servirán de alimento en la época más seca del año,   las tristes y mojadas ciudades, que  seguirán entorpeciendo incansables, el curso de la naturaleza. Y así un día más la luna pinta de un color blanquecino los rostros de todos aquellos que a pesar de la tormenta se han asomado a verla.